Bruno logró el 11° tiempo entre los 30 participantes de esta competitiva prueba, una de las más atractivas del programa del Mundial Indoor y que prevé un durísimo duelo en la final entre la superestrella noruega Jakob Ingebrigtsen y el defensor del título, el etíope Samuel Tefera, además de otros calificados rivales.
La serie 3 fue la más rápida y ganada justamente por Tefera en 3m37s05, seguido por el italiano Pietro Arese con 3m37s31, el portugués Isaac Nader con 3m37s60 y el estadounidense Samuel Prakel con 3m38s69, los cuatro clasificados para la carrera decisiva del domingo.
Para Bruno fue su segunda participación en los Mundiales Indoor, tras haber corrido 3.000 en Birmingham 2018 (también, 5° en su serie).
Este sábado, en la serie inicial de 1.500, el etíope Taddese Lemi marcó 3m38s25, aventajando levemente a Ingebrigtsen (3m38s42). Este es el campeón olímpico de la distancia, consagrado en los Juegos de Tokio, y recientemente batió –en Lievin- el récord mundial indoor coin 3m30s60.
En la segunda serie mundialista se impuso el británico Neil Gourley con 3m42s79, seguido por el alemán Robert Ferken con 3m43s10. Y en la cuarta, el keniata Abel Kipsang marcó 3m37s67 para terminar delante del “millero” australiano Olver Hoare (3m38s43).
Bruno venía de fijar el récord sudamericano de los 1.500 bajo techo con 3m.38s.03 en Sabadell, el mes pasado. Es el tercer mediofondista argentino que compite en los Mundiales Indoor, pero el primero que lo hace en esta prueba (anteriormente estuvieron Luis Migueles en 800 y Javier Carriqueo en 3000).