Carl Lewis, el popular «Hijo del Viento», nacido hace 56 años en Birmingham, Alabama, logró cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Los Angeles 1984, emulando así la hazaña de su ídolo, Jesse Owens (Berlin 1936). Cuatro años más tarde, en Seúl, Lewis retuvo su corona de los 100 metros -en la recordada carrera con Ben Johnson- y se convirtió en el primer velocista en la historia en ganar la «pruba reina» por dos veces consecutivas, algo que recién podría emular y superar Usain Bolt. También en Seúl, Lewis repitió triunfos en salto en largo y posta 4×100, siendo superado sólo en 200 llanos por su compañero Joe DeLoach. Lewis volvería a los Juegos para ganar el salto en largo en Barcelona 1992 y en Atlanta 1996, hilvanando en esta prueba cuatro títulos olímpicos consecutivos, algo que sólo había conseguido Al Oerter en lanzamiento del disco. A esto hay que sumarle sus numerosos títulos mundiales y sus récords, y memorables batallas como la del salto en largo en Tokio 1991, finalmente ganada por Mike Powell. Una leyenda, con quien ahora nuestra Belén Casetta pudo compartir vivencias.
Belén Casetta, junto a un gigante: Carl Lewis
La gran atleta argentina de estos momentos, Belén Casetta, subió a su Twitter la foto que se tomó como el que fue -sin dudas- uno de los más grandes atletas de la historia (para muchos, el mejor junto a Bolt y otros «monstruos»). Se trata del estadounidense Carl Lewis, con quien departió luego de los recientes Juegos Mundiales Universitarios en Taipei. Allí Casetta coronó su gran campaña internacional del 2017 con un sexto puesto en los 3.000 metros con obstáculos, tras su histórico desempeño en el Mundial de Londres (donde fue finalista de la misma prueba y pulverizó el récord sudamericano).